Creadoras en el mundo de las leras - Siglos XVIII y XIX
El XVIII, el llamado Siglo de las luces, no lo fue tanto para las mujeres que siguieron sintiendo los oscuros prejuicios del pasado y su producción literaria se mantuvo escasa e ignorada.
Destaca la figura de la escritora y pedagoga Josefa Amar Borbón con su Discurso sobre la educación física y moral de las mujeres, que junto a las aristócratas Mª Josefa Alfonso Pimental, Mª Francisca de Sales de Portocarrero y María Lorenza de los Ríos y Loyo defendieron el acceso de la mujer a la educación y la cultura, crearon salones, tertulias literarias y lucharon activamente por ser admitidas en Sociedades y Academias.
Como poetas podemos citar a María Gertrudis Hore y a Margarita Hickey, cuyos escritos incluyen duras críticas a los hombres. En su faceta como traductora, introdujo el teatro de Racine y Voltaire en España.
El siglo XIX se inicia con la literatura romántica. En España destacan las figuras de Carolina Coronado y la muy considerada en su tiempo, Gertrudis Gómez de Avellaneda.
La filóloga Carmen Bravo-Villasante en su Una vida romántica: la Avellaneda (1986) nos presenta a esta pionera del feminismo español, apasionada y rebelde ante una sociedad conservadora y misógina. Recordemos que fue la primera candidata a entrar en la Real Academia Española, acceso que se le negó por su condición de mujer.
A diferencia de las anteriores, la postromántica Rosalía de Castro, es una autora imprescindible de los libros de historia de la literatura tanto por su obra literaria como por ser considerada una figura del Rexurdimento gallego.
Entre las escritoras españolas realistas y naturalistas, podemos destacar a Fernán Caballero, pseudónimo de Cecilia Böhl de Faber. Escritora costumbrista, su novela la Gaviota (1849) está considerada sin embargo la primera obra del realismo español.
No podemos olvidar, por su profundo compromiso social, a la escritora y pensadora Concepción Arenal y a la polifacética e introductora del naturalismo en España, Emilia Pardo Bazán. De carácter fuerte e independiente, fue la segunda mujer en ser rechazada por la Real Academia Española.